lunes, 20 de julio de 2015

La canción del solitario


En cada grano de arena, como sustento de sueños perdidos, el mar baña de azul y blanca espuma mi mirada. Me paseo por su horizonte rojo de amanecer donde te hice el amor. La brisa humedece mi piel soñadora justo en el recuerdo de sentirte como si la magia de un beso, fuera eterna tal como el mar,... tu mar salado...Abrazo la ausencia en esta playa herida de caricias. Con pasión soñadora me despierta el día al borde del precipicio con amor ausente. Hilvano recuerdos en mi piel entre granos de arena y, de mi mirada cristalina, impotente al sentimiento, una gota de mar nace, crece y se desliza perdiéndose en la arena.
La voz de mi alma se alza impotente al sol naciente rojo de pesares y angustias. Sensible soy arañando fuerzas de supervivencia, solo en la inmensidad de mi alma al vuelo de las primeras gaviotas; invencible en mi furia que se estrella como las olas del mar buscando un respiro y hallando nada. La vida teje redes rotas de pescadores hambrientos que luchan indefensos con burlas de los bancos de pescado y el lucero de alba, levanta la canción como levanta mi alma loca de altibajos la promesa de la continuidad en el tiempo; imparable la vida en su devenir que enlaza a los seres vivos en unión de red de pescador...
Dejo mi rinconcito en esta playa con sabor a mujer. Mis pasos se adentran en la ciudad, pasos perdidos como los mejores encontrados cuando al final de mi calle con farolas todavía encendidas, me esperas tú, sólo tú..


3 comentarios:

Alondra dijo...

Un escrito precioso, ternura, nostalgia y poesía... Para leer dos veces
Saludos afectuosos

EvaBSanZ dijo...

Gracias, siempre es agradable leer tu inspiración acoplada a la mía. Un abrazo, feliz día.

maduixeta dijo...

describes esa soledad, esos pensamientos, esos deseos..... con una ternura exquisita.
Me encanta tu entrada.

una lluvia de besos, dulce poeta