domingo, 3 de enero de 2016

El silencio



Anda sin materia alguna por el universo y es compañero recibido y otras odiado. Se hace patente el silencio arrastrando sentimientos de soledad, incomprensión, esperanza, compañía, fiestas; como si fuera una salsa que acompaña a todos los sentires humanos, el silencio se hace presente...A veces, el silencio da sabiduría al corazón, saben ustedes que el corazón carece del lenguaje de la palabra y es tan íntimo como silencio que da una solución con un golpe de corazón...

El silencio se siente en una mirada, en el tacto de las manos, en los besos, en la naturaleza, en la muerte, en las cosas intimas que se nos despiertan, acostados, trabajando y así, infinitamente, el silencio nos llena con su sabor carente de sustancia...

En estas Navidades en especial, hay muchos silencios. No lo tomen como a un enemigo porque es natural en su esencia, tomenlo si quieren como algo para aprender en una borágine de comunicación donde el silencio subsiste a duras penas...

Con el silencio la gente ora a Diós. Con el silencio de comprende al Amor. Con el silencio se madura. A pesar del silencio, no tiene por qué haber sentir de soledad y con el silencio aunque sea una milésima, se toman las decisiones más importantes...

El silencio a veces también trae depresión y deseperanzas; soledades que atacan el alma. Entonces es duro el silencio porque crea tormentas interiores que arrasan las almas de las personas...

En esta noche de silencio, escribo. Adoro mi soledad y mis sentimientos arrasan fronteras sin pasaporte intentando llegar a tu corazón y, todo es silencio hasta que estas palabras, se hacen voz en tu pensamiento...

Aganse amigos del silencio debido a que ustedes son silencio muchas veces...


2 comentarios:

Leonor. dijo...

Estuve pescando gallinas y tenia alas, ahora me muevo en mi mundo y vuelo.
Un saludo buscador.

BEATRIZ dijo...

Quiero ser silencio para hacer nacer la palabra. Pero el ruido nos consume en sus aprietos laborales y sociales. Pase una Navidad sin silencios, con voces amadas de fondo y una música de hospitalidad prestada.

Feliz semana.