sábado, 12 de diciembre de 2009

Tú en mí

En alguna ocasión he tenido la fantasía de querer ser invisible para poder ver y estar presente en los sitios más insólitos. Ese sueño, me daba un abanico muy grande de posibilidades e incluso, podía hacerme hasta poderoso por ser espectador y conocedor de ciertos secretos de estado. He de reconocer que aún hoy tengo esa fantasía y para poder quedarme dormido, sustituyo a todo un rebaño de corderitos que saltan por una valla por mujeres decentes desnudas y secretos de alcoba... En mi caso, todo lo oculto me provoca una enorme curiosidad con enormes interrogantes y mi manera de vivir más que todas estas chorradas que cuento, es pura filosofía. Por necesidad me complico la vida buscando el porqué de esas cosas que me dan cierto desasosiego. Este camino no tiene fín por encontrar y descubrir todo aquello que me gustaría saber.
A veces me he centrado tanto en mí que me olvide de las demás personas. Mi mundo interior era inaccesible y no permitía que nadie entrara en el por pura desconfianza. La gente me hablaba pero mi corazón estaba sordo a toda persona que quería ayudar: No hay mayor error... Durante muchísimo tiempo he vivido en una burbuja y sin saberlo, he guardado todos los consejos que me daban porque he escuchado sin apenas querer. Con el tiempo he descubierto que escuchar no son únicamente los oidos sino, todos los mensajes que recibimos de las personas, animales o cosas. Almacenamos tal cantidad de información que nos quedamos pequeños ante el mundo y el secreto de muchas dudas está en la comprensión hacia los demás.
Cuando por fín comprendo la semejanza de nuestros sentimientos y sentir lo que tu sientes, mi humildad se hace patente en el hacer diario. Me quiero en mi justa medida y me abro a todo lo que la vida me pueda aportar. La gente no es producto de desconfianzas sino, de ampliar fronteras para crecer más como persona.
Chambao dice en una canción: "Mirarme dentro y comprender que tus ojos son mis ojos...que tu piel es mi piel..." A veces, lo más sencillo de este mundo cuesta la misma vida apreciarlo en nosotros mismos pero descubrir el acertijo, es cuando la vida nos besa de verdad en la boca y... hasta los besos pueden ser amargos...

2 comentarios:

  1. Mi vecino de blog... es de humano desconfiar, porque es cuando uno esta en pleno proceso de lamida de heridas, por eso la desconfianza.
    Pero mas humano es curiosear, porque estamos vivos y deseosos de sentir y aunque a veces sea morbo, tambien es pura proteccion de saber, porque si supiesemos... cuantas cosas hariamos mucho antes de hacerlas en realidad o cuantas cosas dejariamos de hacer por no ser merecidas...
    Cuando te va mal, no metas la cabeza bajo tu brazo y evites el sol, al contrario, ponte bajo este y que curta tus heridas, te abres a el, a ti y al mundo que te rodea y somos muchos ............. por curar, por sentir, por vivir ...
    Besitos.

    ResponderEliminar
  2. Curioso aprende de la vida, sin saber por donde empezar, cogiendolo todo a su paso, despacio, despacio, aprende, ama, quiere, observa, todo, se puede aprender de todo, de todos, sin desprecio.
    Y ya nos gustaria poder ser una mosca, como dice mi madre para ver sin ser vista y saber lo que no se puede.
    Un saludo.

    ResponderEliminar