martes, 17 de febrero de 2015
Bordar el alma
Como un bordado, de los que hacía mi madre y mi abuela y la madre de su madre en amores de ajuares; de los sueños compartidos que forja el querer con naturaleza humana por sumar sueños con ordenador o sin el...
El mapa del sentimiento humano teje redes de mujeres que entraron en mí para no salir nunca jamás. Los besos y las caricias, los detalles puros y la imagen de aquella u otra mujer que amé; pasearme en sus descuidos eróticos que tanto me alimentaron en darse a lo sublime. Todo forma un entramado para soñar con algo irreal; a lo no conocido. A cada detalle de cada punto, coso mi alma en su recuerdo con inteligencia emocional. Recolecto formas, miradas y figuras de una belleza inigüalable. Mi soledad de gato que aulla su celo en soledad, recorre cada rincón guardado de cada mujer que alimentó mi alma...
Llegarán más mujeres y más desconocidas como cada primavera de savia renovadora. Mi corazón, ya medio usado, volvera a sentir la magia de esa caricia o esa mirada o, ese perfume de mujer para bordarlo en un recuerdo especial que al evocarlo, mi sentir se expanda y vuele quizás en melancolía por haber conocido a esa mujer...
Que bonito lo expresas, quiero ser un pétalo de una flor que compone el tapiz de tu sentir.
ResponderEliminarY, de vez en cuando, hacerte sonreír.
una lluvia de besos