Llega cargada de verdad
una certeza de genio.
Aflora con profundidad y
desde lo profundo...
Se paladea inteligentemente
pero,
algo nos distrae por un momento.
La sabiduría se pierde
allá justo en el infinito
y el olvido, no perdona...
Como un pez,
se me escurre de entre los dedos.
Dios sabe qué es
ese algo que dejó su sabor...
Està bien que deje su sabor...
ResponderEliminarBesos.
Que bonito poema amigo, parece un acertijo jejejeje que será ese algo que nos queda dando vueltas en la mente, hermoso escrito.
ResponderEliminarAbrazos y cariños feliz fin de semana amigo.