lunes, 2 de mayo de 2016
Eleutheria
Cuenta la leyenda que hubo una mujer a la que nadie conocíó. Caminaba por las calles iluminando belleza a la vez que misterio mas, jamás se le conoció amor...Su voz era encantadora con unos ademanes tan refinados, que venían del Olimpo. La constitución de su cuerpo se prolongaba en cada recuerdo como eco de lo sublime... Las mujeres le tenían envidia, los hombres deseo y la naturaleza, afán en imitarla con la procreación de cada ser vivo...
Corrían las habladurías a lo largo y ancho de Grecia comentando que estaba encantada; hechizada por un conjuro maldito en la que estaba destinada a no conocer el amor. A su paso, los pájaros parecían cantar a la primavera más fuerte y las palomas blancas, alzaban el vuelo en cientos de alas batientes para cubrirle el sol de su piel blanca. En su mirada azul la gente conocía el mar. En su pelo negro, conocían la noche más oscura. En su tacto al roce de sus manos, las sedas de oriente y en su voz, las maravillas que esconde el corazón para quién sabe escucharlas...
Hubo conspiraciones contra ella; crueldades de los humanos con corazón roto que se vengan de lo sublime por no poseerlo y también de quién conoció la belleza pero no la mantuvo... La mujer más hermosa del mundo era Griega y filósofos debatían en la universidad de las sinrazones que causan los desvarios de la gente normal cuando una musa, les roba el corazón. Jamás podría ser amada ya que rallaba la divinidad y eso era como ofender a los Dioses.
Su vida era completa soledad. Decían que venía de tierras extrañas, allá donde los conjuros de los Dioses envían una maldición para todo aquel que quisiera hacerse con la sabiduría pues, quién se enamoraba de ella, perdia toda orientación de juicio y claudicaba así hasta la muerte más ordinaria...
A cada respuesta suya no había quién la reclamara y en cada acto, todos huían por no tener cabales sus sentidos en imitarla. La mujer más bella del mundo era Griega y se llamaba Eleutheria...
Obraba de la forma más inteligente conocida en cada aspecto de la vida. En su profundidad se divisaba la profundidad de quién es libre en todas sus consecuencias pero, la soledad y la virtud, la libertad y la belleza, la crueldad y la sabiduría, se dan la mano al juicio humano.
Los Dioses la enviaron al siglo XXI como eco a tantas plegarias que la humanidad pedía en cada oración pero, en respuesta a la respuesta de esos ecos, la humanidad en su conjunto, destilaba las injusticias de la crueldad que da el no aceptarse así mismo cuando unos ojos se miran a un espejo...
Un día, Eleutheria bebía agua en un lago. Estaba cansada de vivir. Sus ojos la miraban en el espejo de la orilla, su torso desnudo era de nacar y sobre la superficie de aquel profundo lago, con lágrimas en los ojos, Eleutheria se dió un beso que la llevo a lo más profundo; donde cada día, las mujeres mas bellas del pueblo cubren su piel como quién reza a San Antonio con agua bendita...Recordando aquel eco del pasado y todo aquello que ha de tenerse presente en darse como fruto al Amor...
La libertad es así: necesaria como temida. Nunca se tiene completamente. Bello significado es la palabra Eleutheria.
ResponderEliminarUn abrazo para ti.
Mi felicitación por este profundo texto que hoy nos deja. BELLA PALABRA, PERO MÁS BELLO SU SIGNIFICADO.
ResponderEliminarUn abrazo, Buscador
Fina
Muy buena historia...
ResponderEliminarBesos
buenos dias buscador amigo que historia mas interesante gracias por contarla me a dejado subyugada embrujaita con la belleza que la cuentas, asi que ella llegó al siglo xxI perdon si pongo el 1 me sale asi y si pongo la i latina no me sale OH no entiendo el teclado no se poner el uno en el teclaado jajaja bueno se me entiende te decia que mala suerte para ella viajar al siglo que estamos la belleza produce envidia, sabes ? me encanta las historias asi de los griegos los dioses del olimpo pero esta historia será tuya a que si ? jajaja es de una belleza impresionante feliz dia amigos para siempre te doy mi palabra besitoss
ResponderEliminarLindo relato. Un abrazo.
ResponderEliminarHe intentado encontrar la palabra que describa la bella sensibilidad con la que describes la feminidad.
ResponderEliminarMe parece esquisito.
¿Sería el mismo río en que se miró Narciso, o es tu protagonista su lado femenino? Lo lograste muy bello, con un ritmo muy atinado, que con todo y que está largo, se lee en un tris
ResponderEliminarUn abrazo.
La leyenda que se hunde en las aguas del pasado, nos deja aquí su imagen de belleza inadvertida. Bien plasmada.
ResponderEliminarSaludos.