Se acercaban esas fechas malditas cuando el sentir se hace denso como la tristeza y ella, estaba sola consigo misma; envuelta en su mundo de ficción que se mezcla con la realidad también maldita. Sobrevivía gracias a su pensión, sabía que cada mes tenía que ir al banco y que el resto de los días, se los comía ella sola, sola, siempre sola con los sueños por cumplir...Todo le ahogaba y nada en su vida pasaba en balde sin recordarle cosas perdidas, cosas que ya no se alcanzan porque el tiempo ya pasó.
Se acercaba la Navidad y aquel anuncio de la televisión la hizo llorar. Aquel día tenia en la cocina tocino decongelado para hacerlo con unas lentejas. Sensible de corazón aquel pesar se hacía más cercano cuando ya estaba cansada de vivir; de soportar y soportarse a si misma, del engaño del día a día en sus paseos por el barrio con gente ausente para decirle un buenos días...La soledad con sus garras la atrapó y ya no la soltaba...
Pero aquel anuncio con una persona de su edad la conmovió. Las ganas de morir se acrecentaban por acabar con toda la miseria que arrastra la soledad; el dolor que no se ve, el silencio que grita y grita sin tener gente cercana...y pasaban las horas delante de la ventana viendo a la gente pasar. Se inventaba diálogos, monólogos y hasta se enfadaba con los locutores de la televisión. La vida pasaba y pasaba por no saber donde echarla en el mismo día en que asumió su soledad. Antes se engañaba sin que esa fiera la carcomiera pero ahora se sentía completamente atrapada...Lloraba.
Aquel anuncio de TV le rasgaba las entrañas; aumentaba la frustracion de sentirse traicionada en su intimidad. RNE anunciaba el teléfono de la esperanza que tanto acompaña a la gente en estas fechas y ella quiso llamar. No sabría como expresarse ni de qué manera contar cómo es ese monstruo que cada día la acechaba en sus silencios. Quizá la maraña y su emoción no la dejarían hablar de esas cosas que seguramente al escucharla, la telefonista se reiría de ella...
Marcó 957 47 01 95. La atendieron enseguida y ella lloraba sin articular palabra... La cabeza iba a explotar de un momento a otro y la voluntaria la tranquilizaba en su intento...María lloraba y lloraba porque alguien desde otro sitio de su ciudad, le preguntó simplemente ¿Qué le ocurre a usted?...Pasaban los días sin un buenos días ni un por ahí te pudras...Siempre pasaban los días en su soledad y su anonimato...Me llamo Maria Écija Garcia y estoy sola...
La soleda dulce y acariciada compañera silente, cuando es buscada y aceptada.
ResponderEliminarPero cruel y asesina que mata poco a poco cuando es obligada.
Y mucho más en personas mayores con poca o nula movilidad, en esas fechas y en todas las fechas.
Real pero triste.
Un abrazo.
Ambar
Has conseguido emocionarme, con este micro, Buscador. Esa soledad que araña tantas vidas. Esa soledad de la vejez, sin lágrimas, pues ya secaron todas, ese mirar a la propia sombra esperando quien sabe que...
ResponderEliminarAbrazo
Fina
Qué triste el día a día de muchos. Un beso.
ResponderEliminarHas tocado en la parte que más me conmueve desde hace años . La soledad de nuetros ancianos.
ResponderEliminarMucho he llorado por dentro viendo cómo se consumian física y mentalmente ,sin hijos que les cuidaran,familia que fuerana verlas ,,,,,,,,,,,
me parece que los ancianos son laasignatura pendiente de la sociedad.Ellos dieron TODO y ahora,molestan.
Aunque es algo personal,Dios me bendijo con el don de poder cuidar a mi madre que era un trocito de ÉL en mis manos,en mi casa.LA acabo de perder hace unos meses y aún estoy de duelo,pero cuidarla me enseñó tanto amor que me siento feliz y con mucha paz.
Sé que no todo el mundo puede tenerlos en su casa,pero sí hacerles sentirse queridos,presentes,sonreirles,cantarles,y sobre todo,tocarles,que sientan las manos del amor,el beso del amor,el abrazo ,la caricia.
Perdona por alargarme tanto,pero lo llevo muy adentro y tu relato me ha tocado el corazón,Gracias!
Besucos
Gó
ResponderEliminarLa soledad puede ser un enemigo mortal que te cae como una losa, también puede ser tu mejor amiga, la que te hace enfocarte en lo que realmente quieres y necesitas en cada momento. Pero hay persona que la soledad que padecen, hacen que sean invisibles para el resto del mundo. Me has emocionado es un texto muy emotivo.
Un grande abrazo.
La soledad tiene vía libre, no paga impuestos por darse el lujo de vivir cómodamente, cualquier lugar, es su lugar siempre que la dejen pasar, excelente amigo.
ResponderEliminarAbrazo
Un tópico real que tenemos que aceptar
ResponderEliminartodos seremos viejos y en el karma de la vida todo se recicla y vuelve a ser
nadie se salva de morir o envejecer
gracias por tus aportes compañero
algunos buscan esa soledad amigablemente...se sabe estar solo
ResponderEliminarpero los que somos hijos y tenemos padres nunca debemos olvidar nuestra responsabilidad
de estar con ellos o acercarnos cuanto mas podemos si estamos lejos...
la soledad angustiante solo llena de desesperación y dolor al que la vive...
Uno nunca debería olvidar que va caminando para el mismo destino...no hay otro.