Las despedidas han de ser para siempre. Volver no es una despedida, es que quedó un hueco en el corazón....Muy pocas veces he regresado. Ante cualquier adiós debe de haber una determinación sin regreso; implacable, pero no quedarse entre dos aguas como si la despedida fuera un simple juego. Las despedidas han de ser para siempre...como quién deja este mundo...
Buscador,no sé si quieres decir con esto que te vas.Espero estar muy confundida,ya que eres una persona muy querida y compañera de los blogs.
ResponderEliminarCon respecto a los que dicen que se van.sea a donde sea,yo pienso que nunca hay un rotundo ADIOS,siempre queda algo por terminar.
Besucos y vuelvo mañana a leer tu nueva entrada,porfa
Gó
Nunca digas nunca jamás. Saludos.
ResponderEliminarLa verdadera despedida es la muerte.
ResponderEliminarUn abrazo.