Las personas que alcanzan la realidad y la verdad en toda su amplitud, pensamos que están en otra dimensión pero no es así. Por una causa u otra según mi vida de cada día, sé que estoy en la dimensión del engaño y que la realidad aún me espera. Nos llenamos de sueños y de ilusiones por alcanzar una plenitud o una calidad de vida; sufrimos muchas veces con hambre por saber pero todo parece tan inalcanzable, que las personas que viven la realidad y la verdad, están en otra dimensión. Nuestra razón y nuestro corazón están preparados pero la educación da mucho qué desear. De esa manera vivimos en el día a día hasta que llegue el túnel donde una luz nos espera y en esa luz nos conoceremos...
No puedo estar más de acuerdo. Tal vez esta vida sea un aprendizaje de lo que nos espera en la otra. Un abrazo.
ResponderEliminarNos dejas mucho en qué pensar. Todavía nos falta mucho por aprender, para alcanzar esas dimensiones.
ResponderEliminarUn abrazo.
Así es, siempre se puede aprender más y más en la educación emocional. Una gran reflexión.
ResponderEliminarUn abrazo, amigo
Cuando lleguemos a la luz y todo tendrá sentido. Un beso
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