miércoles, 6 de enero de 2010
Sin duda, eras tú
Paseaba por aquel parque y sus árboles lloraban. El suelo se bañaba de hojas muertas y las ramas esqueléticas se balanceaban al compás de un viento otoñal. Caminaba perdido aquella mañana, donde cada hoja amarilla llevaba una palabra o una letra en el aire; parecían como abecedarios de inspiración que planeaban en forma de hojas. El frío me calaba hasta los huesos y la gente caminaba ausente, como perdida en sus pensamientos. Deseé que tus ojos fueran los míos en ese momento y que mi corazón fuera el tuyo para compartir sentimientos. Había una hoja en especial que bailaba entre cientos sin saber donde se iba a posar. Yo la perseguía con la mirada pero era tan escurridiza como tú y como siempre, te me has vuelto a perder entre cientos de palabras...
Te recomiendo leas el pos de "Mar de Luna", quizas aclare esa nostalgia que tanto llevas en tus palabras...
ResponderEliminarYo firme un contrato con mi autoesima que a partir del 1 de enero de 2010, podria tener y sentir, pero nada de plasmar, cualquier atisbo de pasado, nostalgia, añoranza o melancolia, que aunque tan bello suena, mas daño hace.
Besitos...