Mi mamá no habla mucho pero sí llora por cosas que no puedo entender pero que sé. Cuando llora y discute con papá, este le pega y es entonces cuando mi mamá me lleva a mi habitación...escucho voces, gritos, sillas caer o alguna olla de la cocina caer; portazos cuando papá sale y miedo, siento mucho miedo a que papá me vuelva a tocar como lo hizo el otro día. Mamá se fué a la tienda de ultamarinos a comprarle cerveza y vino cuando el ya estaba borracho. Me llamó con cariño y sacó un caramelo. Me subió el vestido sonriendo; preguntándome si me gustaba lo que me hacía y a mi me daban cosquillas pero sabía que aquello no estaba bién y me eché a llorar. El me empujó entre sus piernas, entonces grité y llamé a mamá cuando ella ya entraba por la puerta. Yo me abracé a ella, me faltaba la respiración y papá se reía dicendo que era una broma sin importancia. Mamá me llevó de nuevo a mi habitación y los dos discutieron más que nunca, Cuando salí del cuarto, a mi mamá no se le vía un ojo porque en lugar tenía un bulto horrible...Me abrazó llorando; temblando de miedo por mi y me dijo que no le contara nada a nadie de lo sucedido.
Mi papá lleva cuatro días sin venir a casa. La vecinas le preguntan con maldad de chismosa que qué le pasa en el ojo y ella dice que se cayó por las escaleras. Luego la señalan cuando sigue su camino a casa y hoy hemos comido poco. En lo alto de la alacena, siempre hay una botella de ginebra para papá porque cuando llega de la calle siempre la toma viendo la tele. Mamá tiene ojeras marrones y mirada de maniquí que no mira a ninguna parte. La maestra de la escuela me pregunta que de dónde he aprendido a decir esas palabrotas cuando me peleo con los niños en el colegio y yo le digo que de mis padres. Tengo miedo de llegar a casa y mi papá me toque con ese aliento a vino que me da asco. Siempre me toca cuando mamá sale a la calle y me dice cosas que no acierto a comprender pero que cuando me pregunta la maestra parece que a ella también le dan miedo.
Al quinto día mi padre llega a casa. Siempre quejándose y siempre bebido. Mi madre me lleva a mi habitación y escucho caer cosas al suelo, a mi madre gritar y obedecer lo que le manda yo rezo oraciones que el cura me enseña en clase, mi corazón se acelera cada vez más y más y de pronto, UN SILENCIO...
Escucho a mi madre decir ¡¡Hijo de puta!!. Llora subiendo las escaleras pero no escucho a mi padre gritar ni aporrear la pared o la mesa. Abro los ojos de par en par cuando se abre la puerta de mi habitación y mi madre me abraza llorando. Sus manos tienen sangre, su vestido tiene sangre y un aliento de dolor, sale por su boca...
Bajamos las escaleras y ella me dice que no mire; que alze mis ojos al cielo y no al suelo pero yo miro. MI PADRE ESTÁ MUERTO en el suelo de la cocina. La botella tiene un charco de ginebra quese mezcla con sangre y salimos a la calle enpujados por la nada que tantas veces me visita en momentos de no saber qué hacer...
Mi mamá ya no vive conmigo. Vivo en una casa de acogida donde mis compañeras me cuentan cosas parecidas a las mías. Por las noches tengo pesadillas de cuando mi padre me tocaba y a veces grito palabrotas en la oscuridad. He salido por la tele. Mi mamá se está curando de los nervios en un centro que también es una cárcel y los días pasan y pasan con imágenes de mi padre muerto en el suelo de la cocina y mi mamá, ausente de todo menos de mí...
Que relato mas cruel pero por desgracia los hay , esperemos que aprendan y sean castigados para que no vuelvan a ocurrir , me da pavor pensar en lo escrito , si ya el maltrato a la mujer es horrible la violación al menor y hija encima es aborrecible , para mi esas personas no tienen perdón lo siento pero es lo que siento , y no me basta que me digan que es la bebida nooo, es la maldad que llevan dentro .
ResponderEliminarUn saludo y feliz noche.
Escalofriante,pero así es.Qué fuerte tener que vivir una historia como esta y el caso es que ocurre más de lo que imaginamos
ResponderEliminarMe voy con el corazón encogido,pero agradezco que censures el maltrato y los abusos
Besucos
Gó
Se queda el corazón triste después de leer algo así
ResponderEliminar:(
Que triste y cruel relato, y pensar que cosas así ocurren casi a diario por el mundo, y lo peor es que pienso que seguirán ocurriendo y ocurrieron antes, aveces se nace llevando la maldad en la sangre, saludos amigo Buscador.
ResponderEliminarPor desgracia hay situaciones en las que una mujer toma una decisión desesperada. Es más habitual que sea el hombre quien acabe matándola, pero la tragedia en la misma, para el niño o niña, se levanta un silencio insondable.
ResponderEliminarBuen texto, desde la primera persona lo has bordado. Un abrazo
Hola Buscador
ResponderEliminarTe he leido y me ha elado la sangre saber que existen historias asi.
Ya te sigo y te hago una cordial invitacion a mi blog.
Te dejo el enlace por si vistas mis esquinas.
https://www.passionwithoutregrets.com
Gracias, nos leemos :0)
Hola, querido amigo!
ResponderEliminarEsta, infelizmente, es una realidade en todo o mundo y los ninos y ninas sofrem con ela y ficam con traumas para siempre.
Tu escreves, descreves muy bién todo o ambiente k se vive en muchas casas, infelizmente.
Violência doméstica, assunto de k mucho se habla, pero ela existe miesmo. Este borracho foi muerto por su mujer, pero la maioria es o contrario. Son eles k matam las companheiras.
Las mujeres mal tratadas ficam cuasi locas y o governo y a policia no tomam as medidas necessarias. En Portugal y desde janeiro desse ano ya foram assassinadas 12 mujeres. Dramático!
Cuando o pai tocava la hija, no sé con que intenção, sinto repulsa, asco, nojo. Si era com intenção pedofila, entonces k regresse la pena de muerte. Yo soy a favor en mi pais y en todos os outros.
Los hihos, hijas sofrem imenso con estes problemas, pero quiero pensar que un dia, estas crianças, cuando adultos no terão um ambiente como o k viveram cuando eram pequenos en sus casas.
Escutei el video y gostei da voz y da letra da cancion, bien apropriada ao teu escrito.
Besos y bon finde.
Es muy duro tu texto pero más duro es la vida de las personas que tienen que pasar por esto. Jamás comprenderé cómo una madre en el caso de la de tu relato no coge a su hija y no vuelve con el padre. No entiendo cómo deja a su hija que viva con el peligro del padre. Y la hago responsable.
ResponderEliminarSAludos.
ResponderEliminarHola Buscador, menuda historia de esa que te hacen tambalearse. Los padres somos los responsables de nuestros hijos y somos los que debemos estar en alerta para evitar que pueda darse una situación de abuso. Pero cuando el propios padres abusa sexualmente a su hija, no hay palabras. Lo que no entiendo es la postura de la madre.
Feliz día. Un fuerte abrazo.