jueves, 21 de octubre de 2021

Romanticismo

 




 

 Vuelas y me expando en tu recuerdo cuando la edad tardía me lleva a un tiempo donde ahora me encuentro entre la espada y la pared. Las nieves tardías ya platearon mi sién. Mis pulmones, hambrientos de tí, a veces suspiran aires de ausencia tal y como los jovenes enamorados son sorprendidos en la primavera de sus vidas. Añoro tu ausencia enredándome en la fantasía pero, ya es tarde para un encuentro, creo que los mejores años se quedaron atrás de un tiempo perdido por ser un viejo que ya tiene goteras en el alma. Muchas lunas pasarón abriendo las ventanas del alma y este mi amor, se bañó en sueños y realidades como lo hacen las personas que buscan un encuentro. Esta mañana, alguien me comentó que habías preguntado por mi y yo, con lágrimas de cocodrilo no dije nada como siempre pues la timidez siempre me persiguió. En todos estos años, he guardado mis ansias como quién guarda un tesoro y la ausencia de mi casa, se puebla de fantasmas oscuros; los que me persiguen a cada momento fiel a lo que nunca sucedió...


Corrigió las faltas de ortografía. Las manos le temblaban con mirada empañada. Cerró la carta y escribió el nombre de la destinataria: "Estefanía Jiménez Pastor". De seguido y sin pausa, la introdujo en el bolsillo de su chaqueta y se pegó un tiro...

 

 

7 comentarios:

Susana Moreno dijo...

Qué triste final. Un beso

eli mendez dijo...

Un relato magnifico con un final terrible.
Objetivamente, no todos los amores encuentran un refugio en el otro..
No todos se animan al riesgo que implica "amar"..
Creo que para muchos es mas simple pegarse un tiro, aunque desde el otro lado del cristal nos parezca tremendo..
Buscador, siempre sorprendiendo con tus relatos!!! Abrazo grande y gran resto de semana!!!

Paula Cruz Roggero dijo...

Tristísimo final... Un melancólico relato amigo, lleno de ti.

Campirela_ dijo...

Últimamente estas que te sales, me ha gustado mucho aunque como dicen los demás amigos el final triste pero el amor a veces no lo canalizamos como deberíamos hacerlo. Un fuerte abrazo y muy feliz noche.

Sara O. Durán dijo...

Es un relato muy estremecedor... ¡Ese final! Excelente como lo desarrollaste.
Abrazo.

Sandra Figueroa dijo...

Triste final para un gran texto. Saludos amigo Buscador.

Albada Dos dijo...

Ese final es tan trágico, que nos dejas anonadados, Buscador.

Bonita prosa. Un abrazo, amigo