A veces eres feliz con lo más mínimo. Te hacen feliz cosas muy pequeñas y las sabes apreciar de manera profunda. A veces te derrumbas por cosas simples que te llevan a tu pasado y otras, tienes un tesoro que fluye de un manatial muy natural. No quieres hablar mucho de ello y yo, a veces me veo reflejado en tí. Me pregunto hasta donde nos llevan nuestros pasos perdidos si por comprenderlos, son los mejor encontrados; de qué manera el pulso de la desgracia y la dicha, son motivo para querernos todavía aún más. ¿Qué motivos nos da la vida para ser quienes somos?.
Un mundo lleno de matices no es sentirse feliz o desgraciado es , vivir lo que nos da ese instante por improvisar en nuestra vida...
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