Si la gente supiera sacar partido a todas sus facultades, muchos brillarían de tal forma que nos sorprenderían. Quizás solo unos pocos supieron sacarles partido y emplearlas sin tener un maestro que los guíe sin embargo, la mayoría de los talentos se van a pique. En algunas ocasiones, sucede que tenemos momentos verdaderamente brillantes y volver a ellos es como encontrar una aguja en un pajar. Esas ocasiones son como destellos; aparecen y dan su salida por misteriosos motivos que se escapan a nuestra voluntad de controlar dichas facultades. Tener la capacidad de plasmar en la realidad toda esa riqueza, hace que nuestro sentido de la vida nos sorprenda en primera persona. Se pueden descubrir tantas cosas por dentro y fuera de nosotros que son inimaginables e infinitas.
Me gustaría entender y comprender a mi corazón; llegar a ese fondo que brilla mucho cuando se abre una ventana y es tal la curiosidad y la necesidad de alcanzar esas cosas que nunca cesaré de buscar. Me acuerdo del dicho "Más vale maña que fuerza" pero es tanto el empuje de mi corazón que temo mucho romper para siempre el cristal de esa ventana como quién rompe el candado de la caja de Pandora. Me encantaría tener la sensibilidad suficiente de ahondar en el mar de mi corazón y hacer cosas fantásticas...
El alguna ocasión
el corazón habla;
se hace nítido.
Todo miedo desaparece...
Tú soy yo
Yo, eres tú.
Allá lejos
donde Dios está.
Tan cerca...
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