lunes, 5 de febrero de 2018
Pobre de aquel que no escucha a su corazón por no recibir al amor. Jamás lo pudo indentificar en su soledad y pasaba la gente por las calles cogidos del brazo y besos en los labios...Pobre de ese soñador que no encuentra a su media naranja por estar pedido escuchando las maravillas del amor en otras bocas. Si pasaban los años en un pueblo envuelto en sueños de versos y no conocía el amor...Pobre del el, pobre de mí...
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3 comentarios:
Nunca es tarde para poder escuchar el corazón...
Muy profundo y bonito lo que escribes.
Muchos besos.
Pero en tí sí hay amor.
Besos.
Que el amor siga vivo
está en cada quien latiendo.
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