domingo, 7 de julio de 2013

El mayor examen de nuestra vida


El amor siempre es cosa de dos. Pero son frecuentes esos momentos donde no sabes decidir; lagunas insalvables. Tampoco hay cosa más seria en este mundo que el valor del amor. Para mi sería terrible equivocarme de persona. Es un miedo tan enorme ese que tengo, que a veces no doy un paso. Ojalá todas las canciones y todos los escritos hablaran de felicidad...Es tan preciado nuestro sentido del amor...La felicidad sin duda se prolonga con nuestra media naranja pero, muchas veces, mi sentido del amor es algo tormentoso en lugar de ser alegre.
Alguien me dijo una vez que podía equivocarme en muchas cosas, en todas, menos en elegir pareja. Con los años he aprendido a no sentir la soledad y hasta me lo paso bien conmigo mismo; nunca me aburro. Con la llegada de cupido nunca me enseñaron a querer y es preciso sacar valor donde hay dudas. Nunca busco una pareja porque a decir verdad no la preciso pero, sí que tengo un corazón. Sentirse frágil no es cosa agradable para ninguna de las partes. Ojalá la vida fuera menos complicada y, estoy seguro que lo es. Valoro mis sentimientos y no me suelo dar a mujeres así como así. Pero ese abismo herido de dudas de amor, me mata poquito a poco. La naturaleza es así y no hay quien la doblegue.
Nunca dejen ustedes de quererse. Tampoco entreguen lo mas valioso a cambio de un posible desengaño. Tampoco se engañen a ustedes mismos porque sería verdaderamente cruel y si alguna vez se enamoran, no olviden que esa otra persona, espera mucho de ustedes porque en ella han puesto sus sueños...






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