viernes, 29 de marzo de 2019




En una tenue melodía, andamos perdidos buscando la raiz de nuestro corazón. Las sensaciones, la brisa de lo que está por acontecer...sentirme dentro de tí para alcanzar lo que tanto busqué en esta vida... Muero y resucito como un punto y aparte para llegar a mi corazón; me desvivo de tu veneno que no es veneno sino, VIDA...y me pierdo en gestos, en miradas, en un por qué y en un cómo para llegar a tí cuando antes de llegar, debo de reconocerme...




1 comentario:

Albada Dos dijo...

A veces uno se reconoce justo cuando se encuentra a la persona especial que nos sugiere Vida

Muy buena reflexión. Un abrazo y por un bonito fin de semana