miércoles, 12 de junio de 2019

Perdido en la noche






   Gracias a Campirela he encontrado este rinconcito donde quiero participar. Esta noche, entre música y un buen vino quiero dejar mi humilde huella a gente que quizá sea desconocida pero cercana de sentimientos ..os dejo enlace donde visitar los demás relatos que van dejando personas que aportan pensamientos hermosos como esta noche que llega   un saludo  .Roxanabr




A veces mis pensamientos se quedan impresos en la memoria. Cuando la soledad me apremia, despliego mi imaginación como si fuera un pincel o una ventana donde me asomo casi a diario...

Subo a mi azotea sin molestar a los mochuelos posados en las antenas para vigilar la noche que como un  misterio, se adentra en mi mundo interior para desvelarme secretos.... Se escucha a un vecino roncar, a una lechuza marcando su territorio, a un mochelo o a un perro que le ladra a la Luna...y a veces chirría una puerta desconocida cuando el silencio de mi pueblo invita o a un niño recién nacido que llora cuando descubres que es un gato...

 Me deslizo por el horizonte recordando sus matices inalcanzables por el colorido que según los días del año, impera el azul, rojo, amarillo o quizá una mezcolanza de colores que se disponen de tal manera, como si una mano invisible dejara con su pincel recuerdos imborrables para los que soñamos y amamos no sé qué...

En mi azotea tengo un recuerdo del pasado que aun vive: es un cactus que curiosamente da flores amarillas. Cada flor dura un solo día como la mujer más elegante y efímera...Todos los días nacen por lo menos cinco que mueren cuando termina la jornada. No sé el nombre de esta planta ni su variedad, tan solo sé que es un cactus que una vez compré en un mercadillo. Está lleno de capullos por abrirse al manecer y morir al anochecer como una obra de arte perfecta pero no durarera...

Noches como estas, subo a mi azotea con el buén sentimiento de encontrar cosas que no esperaba. Los nidos de golondrina cantan antes de dormir o los gorrioncillos duermen antes del amanecer para aprender a volar porque ya están crecidos mientras que los ruidos de la noche, dan calma a mi espíritu que busca el sosiego en este cantar del alma...



9 comentarios:

Campirela_ dijo...

Me gusta que te unas al proyecto pero amigo tienes que dejar tu enlace en su blog para que te agregue ..así pueden leerlo más personas ..pq realmente has hecho muy buen relato ..Un abrazo !!

Ame dijo...

Una mirada a la azotea, pero vista con los ojos del alma que todo captan.
Un placer, Buscador
Besos

Albada Dos dijo...

Muy bonita esa mirada desde la azotea, donde un cactus renace cada día, con la conciencia de lo efímero

Un abrazo, Buscador

Ángeles dijo...

Una visión impresionante desde la azotea... con una descripción de todo lo que ve, buhos, lechuzas, gorriones, golondrinas y sobre todo esas flores del cactus, efímeras y hermosas que nacen con el día y mueren con la noche. Una visión metafórica de la vida, nacemos con el día y al final de nuestras vidas, morimos, desaparecemos como la flor del cactus... Muy buen relato Buscador, cada vez escribe mejor, al dejar en libertad sus pensamientos.

Un abrazo.

Lia dijo...

Me encantó tu divagar en la noche, y esa facilidad que tienes de ver las cosas que generalmente pasamos por alto. Un beso.

CRISTINA dijo...

Buscador, que tengas un fantástico verano, no trabajes mucho. Estaré un tiempo sin publicar, queria que lo supieras, hasta la vuelta.
Un fuerte abrazo!

Amapola Azzul dijo...

Eres un oasis de paz.

Besos.

Sandra Figueroa dijo...

Muy buen relato amigo Buscador. Perdido en la noche pero siempre en la búsqueda de nuevas sensaciones. Saludos.

Roxana B. Rodriguez dijo...

¡Hola! Primero que nada, una disculpa por pasar tan tarde a comentar el relato. Segundo ¡qué magnífica vista! Me encanta la noche y este pincelazo desde tu punto de vista en una noche solitaria. Un placer pasar por ese balcón.
Y muchas gracias por sumarte.
¡Un abrazo!