domingo, 24 de marzo de 2019

Qué sería sin ella cuando la tengo...






 Por un momento, sintió la felicidad. Por otro encontró la desesperanza y por otro, la seguridad que se evaporaba de la misma manera que llegaba...

Su vida se basaba en momentos y los momentos en recuerdos inalcanzables. Se demostraba miles de cualidades que desaparecían tan pronto como en un estornudo. El mundo bullía en cosas inalcanzables y años de continua perdida y encuentro..."al parecer esto es vivir", te decías cansado de tanto buscar la felicidad y tantas cosas que conocías con Blancanieves de un gramo...

Ahora estaba vacío intentando superar su adicción a algo que ya formaba parte de el mismo; indivisible e imposible de dejar de amar. Era maldita la hora en que la conoció en la barra de una discoteca pero, unida a su alma por hacerle comprender en momentos bajos las maravillas de su corazón...




7 comentarios:

Tracy dijo...

Es que la felicidad son momentos y es fácil encontrarte como has descrito en tu entrada.

dijo...

No fue maldita la hora.Tal vez fue dolorosa,pero con ella y en ella se refuerza más tu caridad ,tu entrega
Eres muy grande
Besucos

Aderet Ela dijo...

Buscador nunca te averguences de lo que en otro momento fuistes,
sentistes, o hicistes.
Sos valiente y eso lo muestran estas tus letras.
Mi apoyo es incondicional.
Te abrazo fuerte
Gracias :0)

Sandra Figueroa dijo...

La felicidad solo son momentos, que aveces nos deja recuerdos que duelen. Un gusto leerte amigo, saludos

Albada Dos dijo...

Es que la felicidad no es algo que se pueda buscar lejos o comparar caro. esso instantes, a disfrutarlos y a pedir que ojalá duren y se multipliquen.

Un abrazo y feliz lunes

Campirela_ dijo...

Siempre tus escritos nos dejan esa sensación de haberlos vivido en alguna etapa de nuestras vidas . Un precioso texto .
Abrazos.

Meulen dijo...

A pesar de lo magro
pueden llegar momentos de paz...