Ojalá es una palabra de largo recorrido en la distancia del tiempo. Un suspiro nos arranca ese ojalá que quizá nunca llega mientras que la mirada y los pulmones, se oxigenan de esperanza. El ojalá es una palabra muy poética; como si fuera ese algo que nos espera para siempre; un algo sin remedio para dar una tregua mientras arreglamos algún asunto. El ojalá nos persigue guardado en los bolsillos del corazón y lo sacamos a relucir en el momento más oportuno...
3 comentarios:
Muy bonito lo que has dicho de una simple palabra, pero que vista de ese modo es una esperezara. Un abrazo.
Así sea
ojalá se cumpla que toda esperanza sea cumplida...
Saludos.
Ojalá llega y nos salva la esperanza. Y cuando se cumple lo deseado es uba bendición.
Abrazos.
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