lunes, 18 de septiembre de 2023

La reina de la noche

 

 

 


 

  Pasan los días en casa; unos bien otros regular. Mi habitación da a la calle y hay noche que no puedo dormir. La vida se me escapa detrás de la mirada; me pierdo en mis pensamientos de día y de noche pero, últimamente prefiero la noche. Estoy cerca de una ventana que da al parque. Mi pueblo respira silencios y el reloj del salón se escucha en mi habitación. Tengo un timbre por si me pasa algo llamar a mi madre...ya ven ustedes con 36 años para depender de otra persona. Me voy quedando sola. Mis amigas ya se casaron una detrás de otra y yo me he enamorado tres veces en mi vida de hombres que me dieron calor y amistad y tonta de mi que pensé que era otra cosa...Esto de las amistades con hombres lo llevo mal porque al final me acaban gustando y la que sufre soy yo. Prefiero el silencio de la noche para navegar por mi interior. La noche es mágica. A veces veo una estrella fugaz y pido un deseo como una ilusión que se pierde en mi memoria. Alguna vez mi gata me habla; me pide que la deje salir a la calle por mi ventana y una vez vino preñada; mi madre me lo tiene prohibido pero no le hago caso. Dejo la ventana abierta para que vuelva a entrar y siento bondad y envidia cuando mi gata busca otros gatos. La radio me habla por los auriculares de cosas que no sabía porque de noche, todo es distinto; cambia el sentido de las cosas hasta que llega el amanecer. Me encantan los olores de la mañana, los sonidos de los pájaros que se despiertan antes que el sol y ese aroma a churros de mi infancia. Me siento la reina de la noche y del silencio. Dentro de nada mi madre despertará y yo dormiré. El día me agobia y hasta me amarga porque lo cotidiano ya me está sobrando; me sobra todo y todo me estorba. A veces lloro cuando me pongo romántica o algo toca mi sensibilidad..,Pasan los días, las noches con sus meses y sus años. Mi trasero está cuadrado y mis piernas no me sirven...Sin embargo la noche me da calma; no necesito nada más. Una noche sentí en mi corazón algo maravilloso que me hizo ser feliz. Desde entonces soy la reina de la noche...



4 comentarios:

Campirela_ dijo...

Qué buen relato, marca mucho la vida de muchas mujeres y hombres tan bien, la soledad una veces querida y otras impuestas da a la noche otra magnitud. Un abrazo.

Frodo dijo...

Uno tiende a pensar en la reina de la noche, como una bailarina que llama la atención, o una comensal agasajada, o mujeres similares.
Buen relato.

Abrazos

Sara O. Durán dijo...

La mente no tiene limitaciones. La protagonista crea su mundo mágico donde reina y donde no tiene ningún impedimento físico para moverse. Es dueña de la noche y de sus sueños, ya de día, a dormir para que pase pronto.
Gran historia
Besos.

Albada Dos dijo...

Esa mujer de la noche. con su soledda y la madre, la gata y la ventana. Un texto exquisito y poético.

Me gustó muchísimo. Un abrazo, amigo