Mi abuela tuvo dos vidas. Los chicos me lo decían en la escuela pero me parecía extraño porque yo vía a mi abuela con un solo presente y un pasado continuo en el que no cabía otra vida. Mi madre era su hija, mi tío Alberto y mi tío Juan también lo eran. Mi abuelo falleció hacía ya tres años por lo que mi abuela se vino a vivir con nosotros.
A veces la vía asomada por la ventana de su habitación. La mirada se perdía por el horizonte y el silencio era un interrogante por saber qué era lo que pasaba por su cabeza en ese momento...Un día le comenté a mi madre ese comentario de mis amigos de cole y ella no sabía qué responder, solo me decía que me fuera a jugar a la calle. Sin embargo, el pasado de mi abuela era un interrogante para mi y mas de una vez estuve tentado preguntarle pues todo aquello me parecía una historia de ciencia ficción.
La habitación de mi abuela era una caja de sorpresas que llamaba poderosamente la curiosidad. Un baúl con llave escondía su pasado lejano y eso era algo bastante tentador por explorar. Su entrada estaba prohibida para mi y para mis hermanas. Mis hermanas sabían mas que yo sobre su pasado pero como mi madre, aquella doble vida se guardaba en secreto. Según mi nobleza y mi respeto, yo era y soy un chico obediente porque pasan los años sin hacer comentarios sobre el asunto y hoy 21 de abril de 2025, los noticiarios anuncian la muerte del Papa Francisco cerca de las 8 de la mañana, justo el día en que mi abuela a la edad de 90 años también se entierra.
En el tanatorio no faltó ningún paisano al entierro y como es natural, también se habla del pasado del difunto. Así de esta manera, pude saber de forma abierta el pasado de mi abuela y no me parece nada escandaloso.
Llego a mi casa cansado ya que los entierros cansan mas que trabajar. Subo a la habitación y en un cajón de una mesita de noche, esta la llave de aquel baúl. Lo abro. Aparecen fotografías de niños que no conozco, también fotos de su boda con otro hombre que no es mi abuelo, ropa infantil, un reloj de pulsera a cuerda, juguetes y un sin fin de recuerdos como venidos de otra vida...Y como en mi casa, también hay una foto de familia con aquellos niños desconocidos y aquel hombre ausente de historia. Mi abuela vivió dos vidas a causa de un accidente donde perdió a sus 3 hijos y a su marido con 30 años de edad.
Después la vida sigue su curso. Se volvió a casar con el que es mi abuelo y tuvo otros 3 hijos. A veces hay noches que sueño con su pasado y siento como si fueran de la familia a aquellos desaparecidos ausentes hasta el día de su funeral. Me sorprende como y de que manera una persona puede rehacer su vida al quedarse solo en el mundo y aquella mirada que se perdía por la ventana hablaba se su pasado ausente. Yo no tendría fuerzas ni valor para hacer lo que ella hizo ni tampoco ocultaría el calificativo de "dos vidas". Ella ya está muerta y enterrada. Es una pena no hablar con ella de su pasado del que nunca renunció pero que guardó para sus adentros. Hoy el Papa Francisco ha muerto. Seguramente en otra dimensión la vida sea mas fácil de comprender...y de superar.
4 comentarios:
No sè cómo se puede superar eso. Un beso
La vida no se para muera, quien muera, se sufre, se padece , pero todo pasa o al menos el dolor se va mitigando.
Y si hoy nos dejó un Papa que marco un antes y un después de los cristianos.
A ver qué nos depara el futuro religioso. Un abrazo.
Conmovedora y triste historia, la vida nos obliga a seguir adelante aunque la mirada se pierda en el horizonte.
Un saludo.
Tuvo dos vidas pero no simultáneas, sino que una siguió a la otra.
Un ejemplo de resiliencia.
Saludos.
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