viernes, 26 de septiembre de 2025

 


 

  Si te olvidé fue solo un engaño a mi corazón porque tu estabas ahí y eso no fue un engaño. Ya sabes lo difícil que me resulta olvidarte y no fue por ti tan solo, que también fue por Dios pues el fue quien me empujó a ti.

 

Pues nada Maribel ahí estamos.

 

 

 


2 comentarios:

Nuria de Espinosa dijo...

Los designios del destino son caprichosos y queramos o no, dirigen nuestros pasos, pero no los sentimientos. Un abrazo

Campirela_ dijo...

Cuando el corazón decide no olvidar , no se le engaña tan fácilmente, el paso del tiempo es el que nos hace ir olvidando , eso si el recuerdo, si el amor fue grande perdura en un rincón de nuestra mente. Un abrazo , cuidate .