Nació con la maravilla por descubrirse el día menos pensado...Su corazón tenía sensibilidad para realizar cualquier cosa y, se puso a danzar por la vida casi sin tocar los pies en el suelo. Era ligera como el viento, bondadosa en sus actos y con un amor que contagiaba a su familia. Como un esponja, su corazón absorbía vida allá donde fuera pues era mágica para interpretar aquello que la devoraba sin apenas esfuerzo.
Pasaron los años y vino la madurez. Como un aullido su alma le regalaba cosas del interior. El lado silencioso de su cabeza escondía secretos que por casualidad fué descubriendo. Tal era su fantástico mundo interior que su mente se abría y abría a lo desconocido y, encontró la paz de su corazón; una vocación oculta para regalar sabiduría a través del yoga. Ella danza y danza para sus adentros en el precipicio del infinito. Cada rincón de su mente, cada enseñanza, lo recibe el corazón amigo para volar mucho más allá de las estrellas sin moverse del sitio y, es tan maravillosa esta vida, que andar y descubrirse sin apenas coste, un día será visitada por una piedra filosofal; la sabiduría, tantas veces buscada y rebuscada por el hombre que se siente solo pero, con un futuro por escribir...
Para Lola
3 comentarios:
Una vida plena logra un maravilloso mundo interior.
Preciosa entrada para Lola. Suave, cual terciopelo, y sí, la soledad regala reflexiones que escribir, historias que dejar germinar
Un abrazo y feliz día
Pocas veces se puede leer en un breve relato un texto tan hermoso como profundo.
Enhorabuena, me encantó.
Amistosamente.
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