Un puente es la mirada que se sostiene con otra mirada.
Caminamos por una acera donde las miradas se cruzan perseguidas del misterio. Una pupila en un segundo, se cruza con la mía hasta que deja de ser un puente de unión y entonces, forma parte del olvido nada mas nacer. Vamos fabricando puentes de camino al trabajo o de camino a ninguna parte. La mirada es el lenguaje del silencio. Nuestro mundo interior informa de lo que vemos y nuestro estado de ánimo pinta con su color a otra mirada...Cada persona lo quieras o no, forma un puente contigo en la mirada en una décima de segundo. Existen miradas fugaces, tímidas, inseguras, ardientes y frías, simpáticas o despectivas...con la mirada, aparece un abanico de posibilidades que forman un puente de unión con mi mirada. No es frecuente pero con la mirada a veces te enamoras cuando surge el flechazo; es ese puente que te roba en corazón durante un tiempo y quizás, no la vuelva a ver...