Siendo famoso escritor y educado para tratar con la gente, un amigo de la juventud me ofrece la cena de su casa; un cortijo donde habita la abuela, la esposa y tres chiquillos...
Entro en el cortijo y un olor pútrido invade mis fosas nasales. El suelo no tiene color y fotografías antiquísimas, de boda, bautizo, servicio militar o comunión, adornan las paredes.
Este mi amigo mostrando el afecto quee me tiene constantemente de da golpes en el espalda, golpes donde ahora en mi casa veo un moratón. Su mujer tiene los dientes amarillos de tanto fumar y fuma tanto que cuando la visito a la cocina, Dios sabe que se le cae la ceniza en la salsa...La abuela ya tiene 96. Temblona y olorosa, le tiembla siempre la mano derecha. Tiene una vista velada por las cataratas y desprende ese aroma de quién vive siempre a la candela del hogar, osea, ahumada está la abuela.
Los niños son unos salvajes. Uno me enseña su perro al que le pone Rocco Siffredi ( ya tiene 12 años y ve esas películas con su padre para saber lo que es la vida y para hacerme una gracia, le saca al perro el prepucio como si fuera aquello todo lo natural del mundo... El otro hijo tiene una escopeta de perdigones que su padre le compró. Un gato entra tímido en el comedor; es un gato tuerto y de pelo ralo al que el pequeño le lanza una perdigonada para ahuyentarlo y a gritos me dice: Lo mato cuando quiera al hijo puta ese...La hija para recibirme, se ha vestido como cuando va a la discoteca. Ella misma me dice que es lectora asidua de la revista Super Pop y que se sabe el nombre de todos y todas las famosas. Ella misma ha escrito una carta a Alejandro Sanz y su padre se emociona cuando la lee en voz alta y yo no sé qué decir cuando tan sólo dice: "Te quiero mucho mucho mucho, no sabes cuanto Alejandro"...
Comienza el banquete y sientan a la abuela a mi lado. Hace cosas extrañas con la garganta. No se si son gases o ronquera y dispone las manos sobre la mesa cuando me sorprendo de que no le dan cubiertos porque dicen que ella come con las manos: a lo antiguo o" a lo moro pienso yo". De vez en cuando intento decirle algo en atención a su persona pero ella está sorda como una tapia y de vez en cuando se tira unos pedos a los que su hijo aplaude por ser salud...
La hija me pregunta por famosos de la tele y si he hecho el amor con alguna famosa y los hijos mejor no verlos porque comen como animales.
La mujer no deja de fumar y de toser. Mi amigo le regaña para que lo deje y nadie se lava las manos para comer. El chico del perro después de lo que hizo se chupa los desdos llenos de salsay todas las enagüillas están quemadas por los cigarrillos...
Me dan un vaso para bridar con vino y veo que en el fondo hay una mosca muerta. El vidrio está amarillo y dándose cuenta mi amigo, me limpia el vaso con su cervilleta usada...
La abuela se pega dos pedos mas que huelen a sudor y a hollín...
Si he de ser sincero, suena la alarma de mi móvil cuando tengo ganas de vomitar en un plato con una salsa donde se ve la ceniza de un cigarrilo o algo similar...Hago como quién se entera de una llamada importante. Mi amigo se ofrece para acompañarme donde haga falta pero me niego. Salgo del cortijo dando arcadas porque la abuela mientras come se ha sacado la dentadura y la chupa como para limpiarla...y el aire de la noche clara, me devuelve la lucidez perdida en una cena, que es la cena de un amigo de la escuela...