Recuerdos como nubes en el cielo.

 

 

 Parece como si algo me llamara en estos días grises del año. Algo se despierta en mi interior para reclamar mi atención y se hace mas pausado; mas lento como las nubes que cruzan mi azotea. La emoción se detiene y me toma de la mano por los recuerdos mas íntimos que aún viven en mi interior; llevados por ese perfume a tierra mojada venida de lejos; irrepetible e intemporal...

Hoy tenía que hablar para escribir hablando de esas cosas que a todo el mundo nos pasa y poca gente habla si no es para sus adentros. El otoño nos alcanza. Es tiempo para disfrutar del detenimiento y sumergirnos en ese pozo sin fondo donde nos perdemos con un sentimiento que es tan denso como pesado. Caminamos entonces  ausentes de nuestro alrededor; como esa soledad que nos alcanza para estar con nosotros por un tiempo donde si te fijas, no todo es triste cuando ese sentir se nos hace agradable y nos llena de vida en su plenitud...

Damos saltos en el tiempo, visitamos a seres que nos faltan, recordamos momentos entrañables que se quedaron fijados en nuestra alma y, siempre volvemos a volver incansablemente...Hoy tenía que verme reflejado en este texto donde no aparecen nombres ni personas pero sí mi voz que forma el conjunto de mi pasado... 

 

 

Cambio de horario

 

 

 Mi novia odia la impuntualidad; es algo que le viene de familia. Ayer por la noche, ella en su casa y yo en la mía, nos jurábamos amor eterno por el móvil hasta que la batería se me agotó y por la mañana( hoy), a las 8 en punto, nos casamos.

 A las 8 en punto me presento con mi familia al completo osea, mi madre y mis dos hermanos pues no hay mas. Sin embargo, veo que hay otra gente en la iglesia que no son de la familia de mi novia...Por un momento nos quedamos en suspense y preguntamos si esta Parroquia es la Parroquia de San Judas: Todos dicen que sí que así es.

Veo gente llorando desconsolada y a una mujer que dicen ser la madrina que está como desvanecida mientras le dan aire con un abanico. Pasado un momento intercambiamos pareceres y nos dicen que no son las 8 de la mañana sino, las nueve: Todo el mundo se equivocó con el cambio de horario. A mi madre le va a dar un infarto y yo no tengo móvil porque mi batería se descargo hablando con mi amada. Mi hermano sí tiene su número pero por mas que lo intenta, la llamada es rechazada...

Hay dos sacerdotes para dos ceremonias. En la parroquia se celebraba una boda en un lugar que le dicen El Sagrario y de allí aparece una chica vestida de novia; como desvanecida envuelta en llanto y yo la reconozco pues fue mi novia de juventud y es la mujer que mas he amado en mi vida. Yo me acerco a ella y ella me reconoce. Se abraza a mi y me pregunta que por qué la dejé y yo le dije que mi abuelo se había muerto y tuvimos que dejar Fuengirola casi al final de vacaciones y no pude comunicárselo pues por entonces no había teléfonos móviles...

Ella no me olvidó y yo tampoco a ella. Me comenta que no quería ser una solterona y que por eso se casaba ahora entrada en años; yo, le dije lo mismo.

Nos fuimos a desayunar toda la familia unos churros con chocolate; parecía que nos conociéramos de toda la vida cuando de un golpe de corazón, le pido que se case ahora conmigo y ella, me dice que sí. Así pues: ¡¡QUE VIVAN LOS NOVIOS!! 

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Cuando se rompre el silencio

 

 

 Si por el roce de una palabra tuya me haces sentir, qué daría por abrazarte...Si la soledad se presta durante la noche tan oscura como tus pupilas donde solo una vez me reflejé a lo largo de estos años. Si eres tu y nadie mas a quién ahora hablo en mi silencio por ser corazón que se expande como la música o la poesía...Si me acariciaras con tu seducción ahora que tu razón está presente en la maravilla del sentir....Si ahora después de todo nada vendrá pues me llevo un perfume y una ausencia que aún espero: ¿No es ya demasiado tiempo?.

 

 

 

La eternidad de una ausencia.

 

 

 

 Es noche cerrada. Llueve un agua fina que te cala hasta el alma y el silencio cala mas que la lluvia. Siento frío y descomposición después de la noticia que me han dado. "Este invierno viene con mas soledades y recuerdos": Me digo. Dan las diez de la noche con diez campanadas que se mezclan con las de un goni de la iglesia. Mis pies están fríos y mi pensamiento enlaza recuerdos que son de ayer mismo cuando mi amigo y yo charlábamos tomando un café y ahora, el está muerto. Poco a poco se desliza el agua por los canalones de los tejados. El perfume de la calle no me es grato pues es como si el perfume de la muerte fuera un sahumerio frío lleno de muerte como da la podredumbre de los muertos pasados unos días. La desolación se escucha a cada pisada de mis zapatos que están tan helados como es el nicho de un muerto...
 

Entro en mi casa envuelta en soledad y cada sonido desde la llaves para entrar hasta el interruptor de la luz, me duelen porque no quiero escuchar nada sólo, cerrar los ojos aunque no pueda dormir. Todo me hiere al sentir mi sensibilidad mas grande que la soledad y me miro al espejo con barba canosa dejada y mi cuerpo maduro que ya olvidó su juventud. Nací como los bebes en la mas absoluta soledad y igual que mi amigo pero yo ahora estoy vivo y el no...Lloro de lo que la vida me arranca y me echo en mi cama vestido; comido por el frío tiritando; como un muerto del recuerdo, como la nada de la edad madura que nos hace viejos hasta que un día, la campana de la iglesia anuncie otro goni que será el mío.

 

( Este relato es ficticio)

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La magia de crear.

La magia del jazz es entrar en un mundo donde los sentidos te conectan directamente con el músico. En mi cabeza se repite cada nota mientras sigo las variaciones y la continuidad de cada tema para entrar en una esfera que es tan peculiar como cada persona...Mi instrumento favorito son los teclados desde siempre. Hay verdaderos poetas del jazz; artistas que cuando los escuchas y los vuelves a escuchar en cada disco te preguntas si ese músico es de esta tierra.

Necesitaría unos años para volver a escuchar cada disco de mi colección porque cada disco necesita una atención, un mimo para que fluya la magia por mis venas. Es tal la profundidad de un buen músico, tanta su riqueza, que me pierdo con la boca abierta cuando sé a ciencia cierta que ese artista en ese momento se siente completamente en libertad; disfrutando cada momento a cada nota.

La creatividad en su composición te sorprende incluso a ti mismo por arrancar de tu corazón mensajes donde eres tú y solo tú el primero en sorprenderse...Ahí radica ser un artista aunque no sea reconocido.

 

 

 

 

Goteras de la edad

 

 Han pasado unos años de la primera a la última. No eres un extraño sino parte de mi memoria. Cuando una persona hace las paces con uno mismo siempre se acepta.

Algo denso fluye por mi cabeza cuando pasados los años la memoria me asalta. Siempre me incliné por la aventura con mis amigos antes que ligar chicas y, me fue bien. En flash-back, viajo ahora por el tiempo y ahora me haces sonreír. Antes eras un modelo cuando cada año muchas chicas querían salir contigo y a todas les decías que no porque eras y soy fiel al corazón. Ahora tengo menos cuerpo de modelo que tu y mas cabeza pero como tú, sigo en las mismas; no cambio ni pegándome tiros. Con tus recuerdos he formado mi personalidad. Me miro al espejo me digo que no estoy mal sin entrar en detalles pero, bien. Recuerdo cada instante de cada fotografía con cada sentimiento y todos los guardo como oro en paño todo lo que es mío, lo es sin haberlo comprado.

 Tu vida, es la mía qué quieres que te diga...he sido un canto rodado muchas veces para llegar a la sencillez. He tenido la ocasión de ver en primera fila lo que es el cataclismo del ser humano tanto en lo personal como en lo físico pero, la madurez, siempre la madurez, me ha salvado de cataclismos que no lo curan las pastillas sino la voluntad de superarse. Tu cuerpo no lo cambio por mi forma de ser. Sin embargo, aquel chico inseguro y con complejos a pesar de ser modelo, me hubiera gustado ser ahora su amigo para enseñarle cosas que aún no sabía...

La vida sigue. Me encuentro bien sin entrar en detalles; abierto a la vida y a lo que me pueda ofrecer como yo a ella pero la juventud ya pasó cuando ya aparecen la goteras de la edad... 

 

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Vuelvo a participar en los relatos de los jueves. Campirela es de nuevo nuestra anfitriona y esta vez nos propone hablar del cuerpo en todas sus versiones. Os dejo el enlace de su blog para que sigáis a todos los escritores que participamos.

He de decir que Campirela tiene merito para ser continuadora de estos encuentros de los jueves. 

MUCHAS GRACIAS AMIGA. https://campivampi.blogspot.com/2025/10/convocatoria-del-jueves-9102025-el.html#comment-form 

 

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La sencillez de lo que nunca vendrá.

 

 No se si odio a la gente o a su sonido mientras se comunican con palabras. Desde que comencé a trabajar no me gustaba mi trabajo ni atender a la gente. Había días que atendía a mas de cien personas; cada una con un problema, cada una con una voz diferente...Por las noches me costaba conciliar el sueño y sus voces se repetían y se repetían en  mi cerebro anunciando la maldición del día siguiente...

Nací en el campo. Mis padres me pagaron unos estudios y me enviaron a Madrid. Allí, con la ilusión de haber cumplido sus sueños, comencé a trabajar en atención al cliente hasta que me he jubilado. Mi principal ocupación era escuchar y ayudar en esos problemas que muchas veces me angustiaban y por las noches me provocaban pesadillas. Evocaba mis días de campo con mi abuelo cuando me enseñaba cosas de los animales que son tan sabios como podemos serlo nosotros mismos o el rumor del río de mi aldea que me ayudaba a pensar cosas que aquí en la ciudad serían impensables. Ahora tengo 67 años. Mi aldea desapareció porque unos se fueron al extranjero y otros a la gran ciudad...

Sueño con el rumor de mi río en ver los barbos subir para desovar, el olor a queso que desprendía el chaquetón de mi padre o el olor a pan recién hecho de mi madre cuando me guardaba la mejor hogaza. Lloro cuando añoro a mis amigos camino de la escuela a cuatro kilómetros donde nos contábamos cosas que muchas veces eran fantasiosas y otras de hombres que conocen la necesidad...El trabajo del campo era duro y mis padres dieron su vida por mi y por mis hermanos buscando lo que nunca tuvieron.

Ahora ya estoy jubilado. Tengo buena pensión pero odio escuchar a la gente; la odio profundamente y no quiero escuchar nada de nadie porque no atiendo a nadie. Mi vida de atención al cliente en una oficina colmó a mis padres de felicidad y puedo jurar que por ellos he aguantado todos estos años. No me he casado pero me he enamorado alguna vez de chicas que al final no congenié. Mis hermanos mayores ya murieron. Las tierras la vendimos con la casa que quedó abandonada porque no había quien la quisiera...

Camino por la ciudad con unos auriculares que compré en una ferretería para aislarme del mundo. No atiendo a nada ni a nadie y cuando me voy a dormir, dejo en mi baño que salga del grifo un hilo de agua que me da vida con su sonido y entonces, sueño con el río de mi pueblo...