No podría.
No me atrevo
abrir este corazón...
Prefiero la mentira
del no saber
qué pasará.
Algo hay que me toca el corazón de forma fulminante...Es esa magia que escapa a la conciencia para que nazca el amor que vino de la nada. Todo se ve de forma diferente y los colores son más intensos. Paseo por las calles en este otoño donde todo a mi alrededor cobra un nuevo brío. Sin duda percibo cosas que taladran mi corazón; mi manantial secreto que me hace ver las cosas de forma distinta. Siento la magia de algo agradable que aflora en el ambiente. Floto como burbujas de jabón con esa sensibilidad que nos hace únicos pero nunca sabremos su origen. Lo inalcanzable se hace cercano en el sentimiento hasta que un día desaparece y noto su ausencia...
Vuelvo a participar en estos encuentros de los jueves. En esta ocasión es Mag la anfitriona. Os dejo el enlace con la gratitud para ella de darnos su tiempo y dedicación.
Gracias.
https://latrastiendadelpecado.blogspot.com/2022/10/convocatoria-un-jueves-un-relato.html
A veces la dulzura se disfruta con un sueño. Nunca quieres despertar cuando la profundidad te trae cosas dulces. Hace nada he comenzado a despertar y he tenido pereza de no hacerlo porque quiero regresar a aquel lugar donde todo es apacible en mi corazón. Juego con las imágenes de lugares fantásticos, estoy con mis seres queridos y estos sentimientos que se expanden más allá de lo que nunca viví. No tengo frío, me encuentro cómodo y de nuevo tengo un asomo de despertar cuando quiero regresar a ese lugar onírico con la plenitud de la vida...Vuelvo a mi profundidad, a vivir intensamente esta experiencia de amor. Creo que estoy en un extasis o una vivencia mística donde el cuerpo es el alma y el alma es el cuerpo. Lo mismo viajo fuera de mi o me adentro en mi mente donde todo tiene una explicación placentera. No quiero despertar. Soy un hombre que alcanza la dicha de Dios fundido con el...Tengo otro asomo para despertar y mi enfermedad creo que no existe cuando me ingresaron en el hospital. Soy un hombre feliz...
Despierto para amar la vida como lo hace un joven maduro. Busco encender la luz e intento levantarme pero no puedo. Algo ocurre aquí. Estoy en un ataud enterrado a tres metros de tierra. Me desepero, grito, araño la tela de seda y no puedo gritar para que alguien me oiga. Mi respiración esta viciada. Me molesta este traje y las flores que han depositado en mi pecho; TODO ES OSCURIDAD. Pataleo, doy puñetazos, siento dolor en mi pecho cosido por una operación y soy el hombre mas solo del mundo; ignorado y olvidado en vida. Si alguien ha sentido el pánico y la angustia cada vez en aumento, la frialdad y el dolor...
Pasan los años. El cementerio ya es zona urbanizable. Una excavadora pone al decubierto otro ataud. La pala lo rompe dejando ver a la luz la lucha y la desesperación de alguien que lo enterraron en vida...
Pasa la vida y cada época. Desde hace mucho tiempo no me importan las palabras. No me importa tampoco aquello que conforma la costumbre que forja ser quién soy ni tampoco todo aquello que a fuerza de repetirlo se hace mío porque todo, cambia...Muchas veces tomamos una costumbre o una mania; algo que se adhiere a nosotros que no nos abandona por ser tan difícil de desechar.
Sí me importa mi silencio; aquello que guarda mi corazón receloso de mostrar pero que me espera cuando me doy de verdad. Cuántas mentiras pueblan nuestro pensamiento que las tomamos por verdades y hasta cambian el rumbo de nuestro camino; cuantos los desengaños...La espiritualidad, el saber infinito, la nobleza, la sensibilidad...Tantos valores que nunca cambian para que nuestra forma de ser no cambie porque el cielo existe. Lo he visto en mi interior. Las personas alzamos la mirada al cielo cuando el cielo está profundo en nuestro interior; en un pozo sin fondo donde yace la sabiduría. Las palabras crean discordia si no se ultilizan bién.
Todo un mundo interior nos espera tras una ventana cerrada. Si la abres, verás que la sabiduría te ha alcanzado donde las palabras sí tienen un sentido porque emanan de la pureza. La felicidad es un sentimiento noble que nunca te deja entonces las palabras se vuelven sencillas como tus pensamientos...
Olvida las palabras y pon tu corazón en esa frontera o esa ventana que se abre cuando vas de verdad por la vida.
Siento tristezas en mi corazón. Mi mamá toma pastillas para la depresión y siempre tiene los ojos llorosos. Mi padre llega muy tarde de la calle; cuando nos vamos a dormir. Se sienta en la mesa y mi madre le sirve la comida. Apenas hablan si no es para discutir. Mi abuelo lleva años encamado y por las noches grita llamando a su madre o a mi madre o, que alguien lo acompañe en lugar de ver la oscuridad de la habitación...Me regañan siempre por cualquier cosa; sobre todo para los estudios y me castigan: Odio la escuela. Sueño muchas veces con mis amigos imaginarios. Uno se llama "Número", otro "Horizonte" y otro "Compañero". Con ellos encuentro la amistad y los sueños bonitos...Mi madre tiene amigos por internet cuando mi padre no está. Una vez se le olvidó cerrar la puesta del cuarto y yo entro viéndola desnuda. Me hizo jurar que aquello era un secreto entre las dos. Mi maestra se preocupa por mi y me pregunta del por qué estoy siempre seria; cómo es la vida de mi familia; si discuten o me pegan y yo, la quiero porque ella me quiere. Sé que la tristeza en un sentimiento que a veces lo acompañan las ganas de llorar y yo, como cada tarde regreso a mi casa triste. Creo que esto que siento se llama: Depresión.
Esta mañana, rompimos nuestra relación. Aún te quería e intentamos arreglarlo todo en una maraña de sucesos donde lo nuestro tocaba a un "The End"...Esta mañana tuve miedo sin tí. Un abismo sin rostro acudía a mi mente mientras te perseguía con la mirada en este parque que se prepara para el otoño. Quise no llorar y un nudo en mi garganta me arranco una lágrima. Al salir del parque, ya desapareciste. Me senté en un banco, perseguí con la mirada a una pareja que iba cogida de la mano y a un niño que quería atrapar a una paloma. El cielo traía calima del desierto y el sol era tanslúcido como un fantasma que me espiaba. Eran las 11 de la mañana.
Paseo por la avenida y por las calles con la mirada perdida porque rebusco cosas en mi interior. Quizás sea un zombi o un sonámbulo que camina por la ciudad perdido y sin rumbo. No ceso en darle vueltas a mi cabeza para encontrar la manera de olvidarte; hasta llevo en el bolsillo el pañuelo que me regalaste, un anillo en mi dedo y las gafas que compre a tu gusto...Estoy completamente envuelto en tí como tu lo estás en mi. Esta mañana llevabas los zapatos que te regalé, el reloj y los pendientes. Llegarás a tu casa y yo a la mía con más recuerdos: Esto es para volverse loco (pienso). El tiempo pasa demasiado lento en este pozo espeso de recuerdos...
Me despierto vestido en mi cama. He llorado y he soñado contigo. Son las 6 de la tarde y pronto anochecerá. Llamo a un amigo por si quiere tomar una copa y poder desahogarme. A las 8:30 es de noche cerrada. Quiero emborracharme para huir un momento o unas horas de esta realidad y ella sigue en mi cabeza golpeándome como un martillo mi sién. Mi amigo es experto en rupturas porque ya lleva tres y me dice que en su caso lo peor de todo es que te quedas sin dinero y no vales para nada...A las dos de la mañana estamos borrachos y quién paga soy yo. Antes de entrar en mi piso vomito en las escaleras de mi bloque 10 Ron con Coca-cola. Me duele el estómago de no haber comido y me tumbo en mi cama.
Me despierto a las 11. Ya han pasado 24 horas sin ella. Mi amigo me decía borracho que la memoria nunca falla para el olvido pero que él ahora es feliz porque todo lo que fué le da igual. Bajo a la cafetería para desayunar y antes de salir, mi vecina me comenta enfadada sobre la vomitona de Ron; que aquello no quedaba así porque su marido se cayó resbalándose...Pido un café cargado que me despeja. Frente a mi hay un espejo y en el espejo mi cara con barba y al lado una alcohólica que se toma otra copa de ponche; me doy asco. Reviso nuestra conversación y nuestro acuerdo de romper. Todo lo demás son sentimientos hasta que un rayo de luz nace de lo oscuro como si de un milagro se tratase y sé en qué consiste el olvido; mi amigo me lo dijo y es que ahora, ya me das igual: algo tan frío que puede con todo...La vida sigue.
Siempre suelo escribir y decir lo que pienso. Voy de cara con sinceridad cosa que en estos tiempos ni en ningunos es algo recomendable y hay que andarse con mucho cuidado.
Sentirse querido en su justa medida es gratificante. Tener buenos amigos es algo impagable. Sentirse uno más en la sociedad como simplemente ser un conocido ni más ni menos; alguien a quién le dices adiós porque te cruzas con el por la calle sin tener mas relación, está superbién. Sin embargo, está la persona que te idealiza, te encumbra, se enamora, te lleva a los altares y no conoce mi forma de ser. Ignorantes de este tipo hay muchos quizá porque están solos, creen hallar lo que no hay, no tienen educación ninguna o buscan en mi lo que no les puedo dar. Dicen que del amor al odio es cuestión de un segundo y es verdad.
Todo el mundo necesita sentirse bién consigo mismo. Fabricar castillos en el aire es fácil pero, esos castillos se derrumban y esa persona que tanto me quería se vuelve mi enemiga en menos que canta un gallo. Nuestra personalidad es única y todos somos diferentes Aprender a ser independientes y tener una seguridad a veces se cobra caro. Se pasa mal cuando te llevas una desilusión pero has de madurar porque de otra manera eres hoja que se lleva el viento...
El detalle está en una imagen o en un sonido cuando alguien se acuerda de mí y ayer, me lo regalaron. No hace falta algo sensacional cuando tu estás predispuesto a recibir. El detalle de esa persona querida basta para agradecerlo...Lo sensible te llega al corazón. WhatsApp se convierte en un mesajero bastante trabajador. Tengo fotografías y videos poco recomendables que son cosas de hombres pero en este caso, mi hermana Chon quiso tener este detalle conmigo (ella no es china). Pasan los días cargados de mensajes de todo tipo. Estoy un poco saturado hasta que llega ese momento donde el amor te hace sonreir. Son esos detalles y esos momentos los que confabulan con tu corazón y te hacen sonreir. En este caso es un video musical...Espero que os guste.
Domingo Guzmán.
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