Luna

La Luna lleva corazón de mujer. Alumbra a los recién nacidos y a los besos de los enamorados. Nadie sabe que extrañas circunstacias me rodean cuando alzo al cielo mi mirada y en oración le cuento mis pesares...La Luna embellece con magia la mirada de la mujer; le aconseja y la guía por los senderos del amor. Tu que eres mujer, háblale a la luna de mi. Dile que soy un hombre bueno que busca tan solo su camino en las profundidades de su corazón. Cuéntale cosas que te digo no sin pecado de que te haga caso. Con humildad alzo la mirada al cielo claro. Lleno mis pulmones con aire de fragancias a mantecados de mi pueblo, y me emociono sin pronunciar palabras que me harían llorar...

Tu que eres mujer, hablale a la Luna de mis sentimientos porque no tengo más doblez de la que escribo. Alza tu mirada con el corazón abierto envuelta en el perfume de tu sentir, como quién pide con sencillez en la puerta de una iglesia. Siente su peso en tu corazón que es el peso de todos los corazones perdidos que le piden cosas maravillosas...

Háblale de que soy un buen hombre por merecer la simpleza de sus palabras. Dile tu que sabes de noches oscuras sin dormir; dando vueltas y mas vueltas hasta caer rendido de agotamiento justo al amanecer...

La luna se perfuma con perfume de mujer. En ella encuentra la comunión el hombre cuando se enamora, encontrando un mundo multicolor desconocido en su vida diaria...Pero dile a la Luna, que soy bueno. Eso es importante porque si ser bueno, el amor que me visite no podrá consumarse en un corazón que no lo es...